jueves, 17 de enero de 2013


Una serpiente de 3 metros decidió viajar en un vuelo entre Australia y  Nueva Guinea. Viajó en el ala del avión QF191.

Veinte minutos después de despegar uno de los pasajeros dio aviso a la cabina. Todos los demás admiraban sorprendidos la lucha de la pitón por mantenerse sobre el ala.
Y aunque esta logro mantenerse en el avión las 2 horas que duró el vuelo, cuando este aterrizó el personal se dio cuenta de que ya estaba muerta. Según un pasajero el viento sacudía con tanta fuerza a la serpiente contra el costado del avión que dejó una mancha de sangre.

Ya que nunca existió la posibilidad de que hubiera alguna otra serpiente dentro del avión este suceso no aterrorizó a los pasajeros quienes no podían más que asombrarse y sentir compasión por el animal que luchaba por su vida.


1 comentario: